sábado, 29 de marzo de 2008

Burbujas, para esa Noche Especial



A propósito del Matrimonio.


Para esa noche única, irrepetible, que enciende pasiones, que nos tiñe de rubor, envuelta de romanticismo, que alimenta la ilusión, que nos llena de luz y que perdurará en nuestras mentes por toda la vida, la bebida que mejor nos puede acompañar no puede ser otra que el néctar de las celebraciones, un espumoso, que con su brillo ilumine la noche con una luz tenue y romántica, nos refresque la ilusión con su efervescencia, y acompañe los rubores con un picor que enciende el espíritu y que nos eleva hasta el infinito.

“Es como tomarse las estrellas”, así describió, el Champagne, Pierre Perignon, resumiendo en 5 palabras, un millón de sensaciones. Dom Perignon, como también se le conocía, era un Monje Benedictino, tesorero de la Abadía de Hautvillers, a principio de los años de 1.600, a quien se le atribuye el descubrimiento y refinación del primero de todos los espumosos, el Champagne.

Encontramos que los espumosos se producen en casi cualquier parte del planeta, y se le conoce bajo diversos nombres, dependiendo de la zona productora. Encontramos, entre muchos otros, el Champagne francés, el Cava español, el Prosecco italiano, así como muchos otros espumantes, sin nombre propio, que son producidos en otros países, tales como, Argentina, Chile, y humildemente con gran éxito en Venezuela.

Productores.
La casa Moet & Chandon, no solo es el productor de Champagne, mas grande del mundo, sino que tiene una serie de inversiones a nivel mundial, desde las cuales produce y comercializa espumantes de primera calidad, tales como, Chandon Argentino, Extra Brut, el cual recomiendo por ser uno de mis preferidos, La casa Segura Viudas, perteneciente al Grupo Freixenet, produce un Brut Reserva, de primera calidad, y entre los locales, Los Brut de Pomar, blanco y rosé, son excelentes.

Los espumantes los podemos clasificar de acuerdo a su color y de acuerdo a su dulzor. Por su color, los blancos, serios, orgullosos, con alcurnia, y los rosados, románticos, intrigantes y seductores; Y por su dulzor, desde los mas secos, serios y robustos, Brut, Extra Brut, Brut Nature, hasta los mas dulces, y sutiles, Sec, Demisec y Doux.

¿Cuál escoger?
Para escoger el color, nuestro criterio de selección debe girar en torno a nuestro estado de ánimo, si nos sentimos románticos, definitivamente un rosé nos acompañará mejor.
La selección respecto al dulzor, va definitivamente de la mano de la comida que acompañará, para comidas saladas, los Brut, destacan mejor las sensaciones gustativas, para postres y dulces, los Demisec, realzarán nuestra experiencia sensorial.

Al escoger para esa noche tan especial, recuerde que el mejor vino, es el que mas le gusta a usted, así que la elección, es totalmente personal, pruebe las diferentes opciones, lo cual resulta un ejercicio, por demás muy agradable, y decídase por la que a usted y su pareja mas placer le produzca, de esta forma nunca podrán estar equivocado, y de seguro harán de esa noche la mas especial de sus vidas. A su ¡Salud!




(Publicado en el Carabobeño 19/07/2007)

viernes, 14 de marzo de 2008

EN ESTAS VACACIONES, UN TINTO DE VERANO


Tiempo de quitarnos el traje, el vestido, la corbata, la camisa, la blusa, el pantalón, la falda, y ponernos el traje de baño, las sandalias, la camiseta, el pareo, los shorts, los lentes de sol, la gorra, y disfrutar de un Tinto de Verano.

En esta época esperada, salimos en busca de descanso, tratando de cambiar de ambiente, examinando alternativas de recreo, y buscándoles actividades a los niños y a los no tan niños.

La Playa, la Montaña, el Llano, son destinos, clásicos, que proporcionan las actividades características de estos lugares, como baños de mar, excursiones, parrillas, campamentos, paseos a caballos, el tradicional juego de bolas, o para los más sedentarios, dominó o cartas.

En la mayoría de éstas actividades nos acompaña el calor típico de nuestro trópico, lo que nos incita a refrescarnos, y a pesar de que el vino tradicionalmente nos induce un poco de calor adicional, aquí les traigo una propuesta diferente, que nos entrega la madre patria, y que nos refrescará de manera, agradable y económica.

El Tinto de Verano es muy fácil de preparar, se mezclan en una jarra:

  • 1/2 litro de vino tinto.
  • 1/2 litro de refresco gaseoso transparente (tipo Sprite o 7up).
  • Un toque (10cc) de Martini rojo (opcional).
  • Hielo abundante.
  • 1 limón, en rodajas como adorno.

Debido a que se trata de un cóctel, se sugiere, usar un vino económico, ya que los sabores y aromas de este, serán arropados por el refresco.

Los que cuidan su peso, lo pueden hacer “Light”, agregando refresco “Ligero”.

El servicio de este trago, normalmente, se hace en vaso largo, sin embargo lo he visto servir en copas, bien sea las que se usan para vino tinto o para agua.

Existen variaciones a la receta original, donde usan refrescos de otros sabores, o jugos de fruta, sin embargo, estás variaciones la hacen confundir con su hermana la “Sangría”.

La historia del Tinto de Verano, no es de muy larga data, se remonta a un cóctel Español, de autor desconocido, que nació entre los años 60 y 70’s, predecesor de este y de nombre Kalimocho o Calimocho, el cual consiste en una mezcla de Coca-cola y Vino tinto. Alguien cambió la Coca-cola por Soda o refresco transparente, le agregó el Martini y el limón, y otro mas lo comenzó a llamar Tinto de Verano.

Lo cierto es que para nuestro trópico, cuando aprieta el calor, este cóctel, es una alternativa agradable, que parece haber sido hecha especialmente para nuestro entorno.

Tome con moderación, refrésquese y Salud!

(Publicado en El Carbobeño Agosto 2007)

sábado, 8 de marzo de 2008

JEREZ UN VINO UNICO

El Jerez es uno de los vinos emblemáticos de España y su proceso particular de crianza, lo convierten en un vino único en el mundo. Quizás sea el vino español mas reconocido a nivel global. Es normalmente seco, con estupendas excepciones dulces, que acompañan las comidas marinas con una gracia y un salero propios de la madre patria, sirviendo los primeros como aperitivo y los dulces como vino de postre.

HISTORIA
Comencemos por ubicarnos en lo que España representa en el mundo del vino. España es uno de los productores más grandes de vino del mundo, ubicándose en el tercer puesto como productor de vino en el mundo, muy cerca de Francia e Italia, primero y segundo respectivamente. Entre los tres países, producen la mitad del vino del planeta.
Algunos estudiosos ubican los inicios de la viticultura en España alrededor del 1.100 A.C., cuando los fenicios introdujeron las primeras vides en la península. El vino que se elaboraba para la época debía ser cocido para que no se dañara. Posteriormente en algún momento de la historia esta práctica cambió por la de añadir alcohol vínico, con el mismo fin, proteger el vino.
En el siglo VIII A.C. aparecen en escena los colonos griegos, quienes dejan rastros certeros de la extensiva y sistemática plantación de viñedos. Un siglo mas tarde, los romanos inician la expansión del Imperio, el cual influenciará, de manera determinante, todo el mediterráneo incluyendo, por supuesto, la península Ibérica.
Hacia el año 711 comienza la dominación Árabe de España, la actual ciudad de Jerez, recibe el nombre árabe de “Sherish”, y a pesar de la prohibición de la ingesta de alcohol del Corán, se siguió consumiendo vino en la región. En el año 966 los viñedos se ven reducidos por órdenes del califa a un tercio.
Alrededor de 1.500, con la reconquista de Jerez por Alfonso X, El Sabio, el vino retoma su auge natural. Para esa época se exportaba vino a Inglaterra, donde se conocía como “Sherry”.
El “Jerez” se pone de moda en la corte Inglesa, hacia el año de 1.587, cuando la Flota de Francis Drake, atacó Cádiz y Jerez, llevándose como botín mas de 3.000 botas de vino.
Para el siglo XV el “Jerez” se exporta para Inglaterra, Francia, los Países Bajos y América.
A partir de 1.682, varios empresarios Ingleses traen capitales a Jerez, fundando bodegas tales como: Garvey, Duff-Gordon, Wisdom & Warter, Osborne. Después seguirían capitales repatriados españoles fundando bodegas como: González, Marqués de Misa, al igual que capitales franceses fundaron: Domecq y Lacave.
Hoy resuenan nombres como, Sandeman, Harvey, Byass, Terry, Domecq, Garvey y Williams & Humbert, así como diversas fusiones entre los anteriores.

DENOMINACIONES DE ORIGEN
La clasificación de los vinos españoles era similar a las encontradas en toda Europa hasta la promulgación de la nueva Ley de la Viña y el Vino de 2003, la cual introdujo profundas modificaciones que todavía mantienen vivo la discusión en torno a ella. Por esto no profundizaremos en la misma e iremos directo a la Denominación de Origen Jerez.
Esta Denominación tiene como sinónimos Sherry y Xerez y es controlada por el Consejo Regulador del Vino de Jerez.
Toma su nombre de la ciudad Andaluza de Jerez de la Frontera, y se trata de un vino Fortificado, es decir, con alcohol añadido, normalmente seco, aunque con extraordinarias excepciones dulces.
Son vinos únicos e irrepetibles, dada las características de suelo, clima y elaboración que encontramos en su zona de producción; Los suelos de mayor calidad, Albarizas, son suelos formados principalmente por Carbonato de calcio de origen orgánico; El clima, tropical cálido, bañado de brisa marina cargada de humedad; Y el proceso de elaboración, característico y particular.
La D.O. Jerez abarca la zona denominada el Triángulo de Jerez, la cual esta constituida por la región comprendida entre tres hermosas ciudades, Jerez de la Frontera, con orígenes moriscos y árabes, Puerto de Santa María, hermosa ciudad marítima, al suroeste de Jerez, y Sanlúcar de Barrameda, también en la costa pero al noroeste de Jerez. Todas ubicadas en la provincia de Cádiz, dentro de la Comunidad Autónoma de Andalucía.

LAS CEPAS
Palomino es la uva predominante en la elaboración del Jerez. Aunque no es una uva recomendada para vinos de mesa por su sabor neutro y baja acidez, sin embargo es perfecta para la elaboración del Jerez.
Pedro Ximénez es otra variedad importante de uva, usada para Jereces dulces. Respecto a su origen, existe una curiosa historia, se dice que un soldado flamenco, de los ejércitos de Carlos I, de nombre Peter Siemens, trajo de la región Alemana del Rhin, unas cepas de “Elbling” o “Weissable”, con el paso del tiempo Peter fue cambiando a Pedro y Siemens por Ximén, dándole nombre a la variedad de uva y al vino que produce.

TERRUÑO Y CLIMA
Formado principalmente por tierras Albarizas, también llamadas “Tierras Blancas”, son las que producen vinos de la mejor calidad. Son formadas por sedimentos orgánicos de un mar interior que cubría la comarca en el período Oligoceno. Es rica en carbonato de calcio. Excelentes para retener la humedad durante el invierno para liberarla lentamente durante el verano.
Hay otros tipos de tierras en Jerez, de menor calidad, barros, de color oscuro, terrenos principalmente arcillosos y arenas, de tonalidades doradas, con alto contenido de sílice.
Su clima se ve marcadamente influenciado por el mediterráneo, se trata de una zona meridional cálida, que recibe vientos húmedos del poniente, los cuales en tiempos de verano actúa como moderador de las altas temperaturas. La región goza de 290 días de sol despejado e intensa luminosidad. Las madrugadas veraniegas son regadas con los rocíos o “Blanduras”, que aportan mucha humedad a las viñas. Las lluvias alcanzan los 600 lts/m2 al año, que caen principalmente de octubre a mayo. El mes de septiembre tiende a ser principalmente seco, lo que ayuda a la sanidad de la uva a punto para la vendimia.



TIPOS DE JEREZ
Existen dos grandes grupos en los vinos de Jerez, los Finos y los Olorosos, y las características de cada uno de ellos vienen dados por los procesos de elaboración y crianza. Estos dos grandes grupos se subdividen a su vez en dos grupos cada uno, tal y como se clasifican a continuación:
Finos, Manzanillas y Pálidos, normalmente conocidos como “Generosos”, son producto de crianza biológica, lo que se explicará posteriormente.
Amontillados, aunque suelen llamarse vinos generosos de licor, solo a los anteriores nos referimos como Generosos, los Amontillados reciben crianza biológica y crianza oxidativa, la cual también ampliaremos mas adelante.
Olorosos, Palo Cortado y Dorados, son vinos licorosos secos, y sólo reciben crianza oxidativa.
Pedro Ximénez, son vinos dulces, naturales o no, y reciben crianza oxidativa.

PROCEDIMIENTO GENERAL PARA OBTENER EL VINO BASE O SOBRETABLA
Se recolecta la uva de forma manual para no dañarla, se pasa por unas máquinas de estrujado suave, de donde se obtiene el mosto de "Yema" que es la base de los buenos vinos, e inmediatamente después a las prensas. El mosto obtenido se introduce en unos grandes depósitos de acero inoxidable donde se inicia la fermentación, a una temperatura controlada de unos 20º centígrados durante una semana y en la que el azúcar de la uva se transforma en alcohol etílico, luego pasa varios meses, durante los que se desarrolla la fermentación que culmina con un vino base, que recibe el nombre de “Sobretabla” o “Mosto”, este último término considerado erróneo para un jugo ya fermentado, nos da la idea de que el vino obtenido, está muy lejos de estar terminado.

EL FENOMENO DE LA FLOR (VELO)
Una vez que los vinos han sido fortificados, y estando todavía en Botas, se produce en los Jereces destinados a ser Finos o Manzanillas, el crecimiento de una levadura llamada FLOR (Saccharomyces), ésta crece espontáneamente en la superficie, la cual eventualmente es totalmente cubierta por ella, protegiendo el vino de su oxidación. La FLOR sólo crece con un máximo de alcohol de 17%. Por esto los Finos se encabezan hasta 15º y los Olorosos hasta 18º.
La FLOR se nutre del oxígeno que extrae del vino y del aire, y de la glicerina que toma del vino, esto cambia el carácter del vino contribuyendo a desarrollar sus características distintivas de aroma, olor y sabor. Al añejamiento bajo FLOR se le conoce como “Crianza Biológica”.
Debido a su alto contenido en alcohol, la FLOR no crece en los vinos destinados a ser Olorosos. Sin esta protección del oxigeno del aire, el vino se oxida mientras envejece. A esto se le conoce como “Crianza Oxidativa”. Esta característica será de mucha utilidad, pues el vino terminado no se oxidará una vez abierta la botella, conservando sus características por más tiempo que un Fino.

AÑEJAMIENTO (SOLERA)
Todos los Jereces, envejecen a través de un sistema único en la elaboración del Jerez. Este sistema se conoce como Solera y consiste en una cadena de barricas, usualmente de entre 4 y 9 niveles, que se utiliza para ir envejeciendo el vino. A continuación se ejemplariza el sistema de solera.


2da Criadera
3ra Criadera
1ra CriaderaEn el esquema, apreciamos una Solera de 4 niveles, el nivel superior contiene el vino más joven, y el nivel mas bajo, es el que contiene el vino más viejo, a este último nivel se le llama también Solera.
SoleraNo es un imperativo que las Botas estén colocadas unas sobre otras, sin embargo, cuando es así, facilitan es trasiego de los vinos entre barricas.

Cuando se produce un vino nuevo, comienza el proceso de trasiego, el cual ocurre mas o menos así, del nivel mas bajo o Solera, donde esta el vino mas envejecido, se extrae una parte del contenido, aproximadamente entre un tercio y la mitad del contenido de cada barrica, este vino se embotella y está listo para la venta.
El espacio vacío es rellenado con vino del nivel inmediatamente superior, normalmente llamado “1ra Criadera”, el cual queda a medio llenar y es llenado con el vino proveniente del nivel inmediatamente suprior, es decir la “2da Criadera”, este procedimiento se repite hasta que quedan las barricas del nivel superior, el que contiene vinos mas jóvenes, a medio llenar, y para llenarlos, se usa el “Mosto” recién elaborado.

El vino de una bota no se trasiega totalmente a otra Bota de un nivel inferior, sino que se distribuye a varias Barricas, lo que ayuda a la Homogenización del vino final.
Todo este proceso hace que los vinos jóvenes se mezclen con vinos en proceso de envejecimiento, convirtiéndose en vino cada vez más añejados, hasta convertirse en el más añejo y este listo para la venta.
Mientras los vinos nuevos se van mezclando con vinos viejos, poco a poco van tomando las características de los más añejos.
Podemos asumir, que cada solera (última barrica de la cadena), contiene una pequeña cantidad (cada vez decreciente), de los vinos más antiguos de la bodega.
Este sistema ayuda a homogenizar la calidad del vino a lo largo de los años.

Debido a que las barricas de Jerez, envejecen en bodegas aireadas y secas a nivel del suelo (en lugar de húmedas como en los vinos de mesa), parte del agua del vino tiende a evaporarse, haciendo que su contenido relativo de alcohol se incremente. Como ejemplo vemos algunos olorosos que después de 10 años de añejamiento pueden llegar a tener contenidos alcohólicos de hasta 24%, contrastando su 18 % original.

Por último cabe señalar que este particular sistema de envejecimiento, hace que los Jereces no gocen de año de elaboración (vintage).

ALMACENAJE Y SERVICIO
Los Jereces se almacenan con la botella parada, en un ambiente fresco y con los cuidados generales de cualquier vino.
Los Finos y Manzanillas se toman fríos, entre 4º y 7º, Amontillados entre 10º y 12º y los Olorosos y P.X. entre 10º y 12º.
El Jerez en general debe tomarse de botellas recién abiertas o que no tengan muchos días de destapadas y hayan estado refrigeradas.
No es bueno guardar botellas de Fino o Manzanilla por más de tres meses. Otros tipos de Jerez, mas alcohólicos y mas oxidados como los olorosos, los dulces, etc. Pueden ser guardados por más tiempo.

MARIDAJE
Finos y Manzanillas, van muy bien con almendras, aceitunas, camarones o langostinos, y en general toda clase de comida marina. Así como con todo tipo de tapas Españolas.
Amontillados, aunque van bien con Tapas, también acompañan sopas, queso, jamón, salami y chorizos en general.
Olorosos y Palo Cortados van mejor con nueces, aceitunas, y quesos duros incluyendo el manchego.
Todos los Jereces dulces, acompañan bien los postres.

Su sabor particular nos hace recordar el mar. Por lo que acompaña los frutos marinos de una manera impecable. Va muy bien con la mayoría de los productos mediterráneos tales como, aceitunas, almendras y frutos secos en general, así como los quesos de la zona. Y es compañero obligado en la fiesta taurina, que sería de una “Bota” Taurina sin un buen Jerez, como maestro de ceremonia, de la mezcla que colocamos dentro. Y “olé”.

lunes, 3 de marzo de 2008

VINOS ESPUMOSOS






Los vinos espumosos son sinónimo, de celebración, fiesta, alegría. El juguetón “pop” del corcho, cuando salta, abre nuestros sentidos a la diversión. Sus burbujas son seductoras y acompañan bien casi cualquier comida. A pesar de su aristocrático origen, hoy día es consumido y producido en casi cualquier rincón del planeta. Su alta acidez natural, su efervescencia y la temperatura de consumo, sumamente baja, hacen de estos vinos, auténticos estimulantes de nuestros sentidos

HISTORIA
La historia comienza con el más famoso de los Vinos Espumosos, El Champagne. Por los años 1.600, un Abate de nombre Pierre Perignon, llamado Dom Perignon, fue nombrado tesorero de la abadía de Hautvillers, y entre sus quehaceres estaba la elaboración y guarda del vino. Lo frío de la región hacía que en invierno se detuviera temporalmente la fermentación, por lo que procedían a embotellar el vino, y luego al llegar la primavera, y elevarse la temperatura, la fermentación se reanudaba pero ahora dentro de las botellas. Esto hacía que el gas, subproducto de la fermentación quedase atrapado en el líquido. En busca de corregir lo que asumían como un defecto, Dom Perignon perfeccionó el arte de la mezcla de vinos y posteriormente el proceso de la segunda fermentación, ahora si, con el objetivo de garantizar las burbujas en el vino. A este método se le llama Método “Champenoise” o Método “Tradicional”.
Debido a la gran aceptación de este vino, a nivel mundial, productores alrededor del mundo copiaron el método, y hasta inventaron otros, para fabricar vinos espumosos. Incluso llegaron a copiar el nombre, Champagne, sin embargo, hoy día, ningún productor de vino espumoso de calidad, usa el término “Champagne”, ni siquiera “Champaña”, para nombrar sus vinos.

PARA QUE SEA CONSIDERADO ESPUMOSO
La cantidad de gas atrapado debe ser suficiente para formar espuma mientras es servido, y debe permanecer burbujeando mientras se toma, formando rosarios de burbujitas que se mantienen activos por largo rato. No se llama vinos espumantes, a los vinos con gas residual de la fermentación, que apenas se percibe como un agradable picor en la lengua, y que son llamados vinos de aguja, tales como el Vinho Verde, portugués. Desde el punto de vista técnico, un vino es de aguja si la presión dentro de la botella a 20 grados centígrados es menor a tres atmósferas, mientras que los vinos espumosos mantienen una presión aproximada de seis atmósferas.

METODOS DE PRODUCCIÓN DE ESPUMOSOS
El método mas famoso es el “Champenoise” o método tradicional, es a través del cual se produce el Champagne, y consiste en una doble fermentación del vino, esto se hace mas o menos de la siguiente manera, primero se fermenta el vino de manera normal, luego este vino será utilizado como vino base, al que se le inducirá una segunda fermentación, agregándole azúcar y levadura, y embotellando la mezcla, para que el gas de esta segunda fermentación quede atrapada en el líquido, luego se conducen las lías (sedimentos de la fermentación) al cuello de la botella, por gravedad, y para eliminarlas, se congelan rápidamente se destapa la botella logrando que la presión expulse el tapón de lías, por último, se rellena la pérdida de líquido con licor de expedición, se coloca el corcho con su bozal de alambre, y se etiqueta para su venta. Existe una variación al método “Champenoise” que es el método “Tranfer” o de “Transferencia”, este se diferencia con el primero en la forma de eliminar las lías, en este método se vacían las botellas en un tanque presurizado para ser filtrado el vino y se vuelven a llenar para tapar etiquetar y que salgan a la venta.
El segundo método más importante, fue introducido en 1907 por Eugene Charmat, quien patentó el método que lleva su apellido “Charmat”, también conocido como método “Granvas” o “Chaussepied”, en el cual la segunda fermentación es inducida en grandes tanques de acero inoxidable, herméticamente cerrados, para que el gas quede igualmente atrapado en el vino. Este método, acelera el proceso y abarata los costos de producción. Debido a que el vino está en contacto con las lías por menos tiempo, los espumosos producidos con este método no tienen la complejidad de los producidos con el método tradicional.
El tercer método en importancia lo que hace, es introducir gas carbónico directamente al vino base, como se hace con un refresco, este es el método utilizado para producir los espumosos mas baratos y de menor calidad del mercado y que tienen como característica burbujas grandes que rápidamente desaparecen del vino.

ALGUNAS DENOMINACIONES DE ORIGEN
Las denominaciones de origen de los vinos espumosos son numerosas, y los encontramos en muchos países del mundo, entre los más destacados, y organizados por países encontramos:

FRANCIA
Champagne
Comenzamos por la más famosa de todas, “Champagne”, ubicada en la zona noreste de Francia, en ésta se utilizan las cepas Pinot Noir, Pinot Meunier y Chardonay, y por supuesto el método de elaboración es el método “Champenoise” o “Tradicional”.
Loire
Esta región situada al suroeste de París, produce vinos espumosos “Vins Mousseux”, producidos con ensamblaje de las unas Chenin blanc, Chardonay, cabernet-sauvignon y cabernet franc. Con el método “tradicional”. Llamados Crémant de Loire.
Alsace
Con el uso del método “champenoise” y las cepas, Pinot blanc, pinot noir, pinot gris, Chardonay, riesling y Pinot auxerrois, producen los famosos espumosos, llamados Crémant d’alsace
Hay muchas otras zonas en Francia que producen vinos espumosos menos afamados como “Bodeaux” y “Bourgogne”, entre otros.

ESPAÑA
La denominación española, mas conocida en España, y la segunda mas conocida en el mundo, es el “Cava”, el cual se produce en la España Catalana, al Noreste del País, utilizando el método tradicional, pero con una mezcla de al menos una de las siguientes cepas: Macabeo, Xharello, Parellada, y Chardonay.

ITALIA (Spumante)
Asti
Asti spumante y Moscato d’Asti, se elabora al norte de Italia, en la zona del Piemonte, utilizando la cepa moscato, y a través del método “Charmat”.
Trento
Se produce al norte de Italia, en la zona de Traentino, apegados al método “Tradicional”, y elaborado con las uvas Chardonay y Pinot Noir.
Prosecco
Región de Veneto al norteoeste de Venecia, utilizando uva prosecco, y con los métodos “Tradicional” y “Charmat”.

Aparte encontramos una serie de vinos espumosos sin denominaciones de origen oficiales que se producen en los siguientes países:

ALEMANIASekt, término usado para los espumosos, son elaborados normalmente con las cepas Pinot Blanc, Riesling, y con cualquiera de los tres métodos “Tradicional”, “Charmat” o “Gasificado”, sin embargo, si se elabora con el tercero nombrado, deben llevar la cita “Vino hecho con la adición de dióxido de carbono“”.

SOUTH AFRICA (Sparkling)
Cap Classique es el nombre que reciben los espumantes más famosos de este país, elaborados a través del Método “Tradicional”, principalmente con las cepas Pinot Noir y Chardonay,

USA (Sparkling)
California
En esta extensa zona, se producen espumantes, principalmente, con las cepas autóctonas de la “Champagne”, Chardonnay, Pinot Meunier y Pinot Noir, a través del método “tradicional”.

AUSTRALIA (Sparkling)
Las variedades Pinot noir, muscadelle, chenin blanc, y semillon, son las más utilizadas, pero tambien usan Shiraz, para producir uno de los más raros espumantes, un tinto. Para sus espumosos usan los métodos, “Tradicional”, “Transfer”, y “Charmat”.

VENEZUELA
Con el método Tradicional (“Champenoise”), y principalmente con uvas Chenin Blanc, Macabeo, Malvoisie y Syrah, son producidos los espumantes de esta región.

Entre otros muchos países que producen espumosos están, Argentina, Austria, Bélgica, Brasil, Canadá, Chile, Inglaterra, México, Nueva Zelanda, Rusia, Portugal, Uruguay, etc.

MARIDAJE
Los espumosos, son uno de los vinos más versátiles del mundo, en lo que acompañar la comida se refiere, va bien con casi todo, va muy bien con pescados y mariscos, es el maridaje clásico de comidas muy saladas, va de la mano aves de cualquier tipo, se acomoda mejor a salsas suaves, pero puede acompañar algunas fuertes, y con los postres, en especial los “Demisec”, ni hablar, es perfecto con casi todos los dulces, incluso el chocolate, va de maravilla con las frutas, y es especialmente compañero de las fresas. Son excelentes en cócteles, uno de los más famosos, con jugo de naranja, el “Orange Blossom” o “Mimosa”, sin olvidar el “Pato Frío” cuya mezcla incluye fresas.
Aparte, los Espumantes son buenos a toda hora, pueden acompañarnos en un Brunch mañanero, en un sustancioso almuerzo o en una elegante cena.

La producción de espumosos a lo ancho de todo el mundo, y la introducción de nuevos procesos de producción, han contribuido a socializar la oferta de este tipo de vinos, ofreciendo precios mas solidarios con nuestros bolsillos, a conciencia de una pequeño sacrificio en la calidad.

(Publicado en "Valencia Económica" en julio 2008)